DECLARACIÓN DE SEVILLA
(Documento elaborado por el Comité Permanente del F. S. T. E. 2009)
Poder transformador del amor
En Sevilla (España) a 10 de Octubre de 2009 el Comité Permanente
Organizador del Foro Social Temático Español de Espiritualidades y
Éticas para otro mundo mejor posible (FSTE2009) que aspira a debatir y
alumbrar desde la sociedad civil los principios y valores sobre los que
poder construir otro mundo mejor, necesario, urgente y posible; a
ofrecer una alternativa democrática, inclusiva, ecológica, basada en la
igualdad, defensa de los derechos humanos, convivencia pacífica y
respeto a la rica diversidad de culturas y creencias de una única
humanidad a los acuciantes problemas que enfrentamos,
DECLARA:
1.- Introducción.
Vivimos un tiempo en que el conocimiento aportado por la ciencia a
la humanidad hace avanzar la conciencia de nuestra mutua
interdependencia global con la totalidad de la Vida en nuestra generosa
Madre Tierra. Vivimos un trascendental proceso histórico de rápidos y
profundos cambios que nos obligan a recuperar el equilibrio y la armonía
entre la naturaleza, la humanidad y los valores éticos y espirituales
que permitan una realización plena de las personas en todos los pueblos,
etnias, culturas y civilizaciones de la humanidad.
En un tiempo asombrosamente breve desde el punto de vista
biológico hemos transformado el entorno social, productivo y emocional
del ser humano para el que debemos “crear” una nueva cultura y unos
nuevos mecanismos de seguridad y supervivencia que garanticen la
continuidad de la vida y nos proporcionen instrumentos de gestión de los
cambios sociales. A partir de ahora la humanidad tiene que hacerse
cargo de construir su propio futuro de acuerdo con una ética de la vida
que coloque al ser humano y sus condiciones de supervivencia y
sostenibilidad, es decir, integrado en la Vida con mayúscula de la
naturaleza, de la que es producto y parte, en el centro de la historia,
instituciones y leyes. Un nuevo espíritu que recupere valores
ancestrales y añada los necesariamente nuevos para este nuevo tiempo que
nace. La ciencia se abraza con la espiritualidad provocando la mayor
transformación política, social y ética que haya vivido la humanidad en
su historia.
La ciencia que hoy busca el origen de la materia y de la vida sabe
que el universo está formado por un 4% de materia visible, un 22% de
materia oscura y un 74% de energía invisible que todo lo impregna. Los
tres conforman una única totalidad.
No hay luz sin oscuridad. No hay oscuridad sin luz. No hay la una y
la otra sin la energía universal que todo lo une. Y esa energía que
forma parte de toda Vida y nos impregna es a la que la humanidad, todas
las civilizaciones, han llamado Amor o Dios.
El poder que nos da esta fuente inagotable de Amor de la que somos
parte nos exige a la humanidad que es, a la que vive este tiempo, que
disuelva los vínculos económicos, sociales y políticos que le impiden
avanzar y superarse a sí misma. Los que ensucian el mundo y destruyen la
Vida. Los que dividen, separan y enfrentan a una parte de la humanidad
contra otra provocando muerte, miseria, enfermedad, Declaración de
Sevilla Poder transformador del amor 1a desesperanza, odio y miedo. Nos
exige levantar la fraternidad de una única humanidad que surge y vive en
un único planeta del que es conciencia y voluntad.
2.- Preámbulo.
La orientación hacia la unidad, hacia el “alma” común de la
humanidad, instaurará las condiciones del “buen vivir”, de otro modo de
vivir basado en maximizar el bienestar social, la satisfacción de las
necesidades humanas con el menor consumo y coste, retornando a la visión
de la humanidad como parte y fruto de la propia naturaleza.
Toda la ciudadanía del mundo tiene los mismos derechos y
obligaciones. Toda organización económica, social y política tiene la
obligación de promover la Vida, la libertad y la felicidad de la gran
familia que conforma la humanidad. La humanidad tiene el derecho y el
deber de reformar o abolir cualquier tipo de Poder económico, social o
político que dañe o intente destruir estos principios, y a organizar
nuevos poderes que garanticen su supervivencia, seguridad y felicidad
presente y futura. Todas las civilizaciones que constituyen la humanidad
tienen derecho para convertir sus deseos en realidad a la construcción
de un mundo ecológico, con igualdad de género, imperio de los derechos
humanos, realización personal, convivencia pacífica multiétnica y
democracia participativa. Y todas deberán asumir estos principios en
profundidad para poder superar este periodo difícil de transición con
entusiasmo.
Manifestamos nuestro optimismo, esperanza, firme voluntad y
completa determinación en nombre de la humanidad que es, en honor de las
que han sido y por responsabilidad ante las que vienen.
3.- Acusación.
La humanidad y la Vida en el planeta están en peligro a causa del
actual sistema capitalista deshumanizado y depredador, por el
individualismo y la sacralización del mercado que alimenta los valores
de egoísmo, avaricia, vanidad y envidia que impregnan a todas las
sociedades del mundo. La mercantilización de todos los aspectos de la
vida lleva a la humanidad a sufrir hambre, miseria, enfermedad, paro,
migraciones masivas, violencia y muerte. El cambio climático
consecuencia de la forma de vivir en el actual sistema pone en peligro
la supervivencia de la Vida en la Tierra. El gobierno del mundo se
detenta desde un Poder nebuloso, oculto, ilegítimo y dictatorial que tan
sólo defiende sus propios intereses privados, los de una minúscula
parte de la humanidad. La acumulación de las riquezas del mundo en sus
manos nos ha impuesto los principios seudomorales que hoy nos corrompen
desde el interior, siguiendo los cuales hemos exaltado algunas de las
cualidades humanas más dañinas, colocándolas como virtudes sociales.
Esta acumulación de riqueza ya no puede ser el valor que de importancia
social. Necesitamos grandes cambios en los códigos morales que den a los
motivos monetarios su verdadero valor. El amor al dinero como posesión
tiene que ser reconocido como una morbosidad repugnante, como una
enfermedad mental.
Necesitamos una profunda revolución ética y espiritual.
La mercantilización de la Vida nos ha llevado a la mayor crisis
ecológica desde que existe la humanidad, rompiendo todos los equilibrios
de la propia naturaleza. Desde
el actual sistema depredador que agota los recursos de todo tipo no hay posibilidad de futuro. Tampoco para la humanidad.
La deriva que nos ha llevado a los máximos niveles de polarización
y desigualdad social ha provocado también el mayor ataque a los
derechos humanos y al sistema democrático bajo el pretexto de la
seguridad, y conseguido gracias al miedo de masas conscientemente
provocado. La libertad de opinión y expresión base de una ciudadanía
libre, participativa e implicada en el gobierno de lo público, ha sido
secuestrada por la propiedad privada de los medios de comunicación de
masas en manos de los intereses de los grandes capitales, usurpando
nuestro derecho a la información veraz y completa y transformándolos en
medios manipuladores de la opinión pública.
La economía dirigida por la locura de un crecimiento sin límites
que exige la acumulación ampliada del capital y el interés privado lejos
de satisfacer las necesidades sociales y promover la felicidad y
autorrealización de la ciudadanía en libertad, provoca la escasez,
miseria, ansiedad e inseguridad permanente en la inmensa mayoría de la
humanidad. La sexta parte de la humanidad está padeciendo muerte por
hambre y desnutrición permanentemente provocada por una economía
especulativa que sustrae y asfixia a la economía real.
La convivencia pacífica intercultural es saboteada continuamente.
Acaban, magnicidio incluido, con los líderes modernizadores e
integradores en todas las culturas; fragmentan y dividen promoviendo el
radicalismo y el fundamentalismo religioso en todas ellas y, por último,
provocan deliberadamente los enfrentamientos entre ellas para
aprovechar el caos y tomar lo que desean. La justificación ideológica
del enfrentamiento de civilizaciones la convierten en profecía
autocumplida.
La Gobernanza mundial de los aspectos esenciales para la humanidad
(finanzas internacionales, comercio, cambio climático, salud y
migraciones) es sustraída al control democrático, impidiendo la
construcción del “alma” común de la humanidad, de la ciudadanía
universal como nuevo poder soberano del mundo. Vacían de contenido la
democracia sustituyendo al ciudadano por el consumidor, atacando el
desarrollo de todo tipo de democracia participativa que las nuevas
tecnologías permiten.
La desigualdad de género se mantiene dentro y fuera de las
personas en todas las culturas y civilizaciones, provocando injusticias y
límites al desarrollo personal y social
tanto para mujeres como para hombres, impidiendo la plenitud del
desarrollo humano en ambos sexos, al reproducir los mecanismos de poder
social en las relaciones sentimentales y en el seno de la vida familiar y
de pareja.
Se nos impide vivir en paz y armonía en un mundo libre de guerras
bloqueando las vías de solución pacífica de los conflictos mediante la
proliferación de la mentira, calumnia y difamación desde los medios
masivos de comunicación que monopolizan la información. Provocan con
cinismo guerras para garantizar el mantenimiento del Poder
y seguir acumulando riquezas.
Impiden la promoción de la educación como creadora de personas con
criterio propio y fuertes convicciones, base de la verdadera
democracia. Impiden que la educación sea una herramienta que haga crecer
a las personas y los pueblos en la asimilación vital de los valores e
iniciativa creativa para construir un mundo justo, pacífico, respetuoso y
en armonía con la naturaleza y abierto a todas las dimensiones del ser
humano y de la vida, La educación se mercantiliza para proveer al
mercado de los recursos humanos configurados tal y como el capital
requiere para su reproducción.
El mal vivir diario en los valores, tensiones y frustraciones
constantes que provoca el actual sistema social capitalista impiden la
paz y tranquilidad interior que necesitamos para el pleno desarrollo de
nuestra personalidad que nos impliquen en la necesaria e imprescindible
transformación social a favor de la justicia, la paz y la conciencia de
integración con la naturaleza y la energía universal de la Vida.
Vivimos el final de un largo ciclo de conflictos y guerras, de
inversión de los valores, de promoción de sistemas de pensamiento e
ideologías económicas, sociales y políticas aberrantes que pervierten la
verdadera creatividad y conocimiento científico de la humanidad.
Vivimos el tiempo en que es imperioso limpiar la suciedad del mundo.
El tiempo del robo, violencia, asesinato, mentira, procacidad,
codicia, corrupción y lujuria. El tiempo en que las enseñanzas
ancestrales han sido pervertidas por sus propios guardianes traicionando
su mensaje de liberación para la humanidad sustituyéndolos por los
nuevos ídolos de Poder y mercado. Tiempos de guerras, pandemias, hambre,
catástrofes económicas, olvido de la solidaridad y fraternidad y
subversión de toda moral. El tiempo en que el mundo es gobernado desde
las sombras con tiranía. El tiempo en que se construye el más alto
edificio del mundo en la ciudad rodeada por el desierto.
4.- Denuncia.
Desde hace décadas hombres y mujeres, sociedades y pueblos
conscientes y justos en multitud de foros han advertido y denunciado el
derrotero por el que se camina hacia el abismo suplicando por las
reformas necesarias. Al principio negadas, obviadas por irrelevantes, y
contestadas con injurias y violencia después. Hoy ante la obviedad
incuestionable de su realidad y urgencia asumidas con cinismo para
controlar la gestión de las reformas. Cambiar algo para que nada cambie,
para poder seguir igual. Un gobierno del mundo tiránico que cree ser
envidiado por todos y alardea de haber “evitado el abismo”, la muerte
del sistema capitalista, desconociendo que este debe y tiene que morir
para permitir el renacer de la verdadera sociedad democrática del saber
integral y universal, la llegada del reino del amor y la solidaridad.
5.- Conclusión.
Por tanto, nosotros miembros del Comité Permanente organizador de
este Foro Social Temático Español de Espiritualidades y Éticas para otro
mundo mejor posible, sin más autoridad que la rectitud de nuestras
intenciones y confiando en el Poder transformador del Amor, damos voz a
la ciudadanía civil, a la humanidad, haciendo público la presente
declaración: La humanidad tiene el
derecho y el deber de abolir las formas de organización económica,
social y políticas actuales que provocan invariablemente una larga serie
de abusos y usurpaciones dirigidas a someterla a un despotismo
absoluto; es un derecho y un deber derrocar este gobierno de las cosas y
proveer nuevas salvaguardas para la biodiversidad, las libertades y la
futura felicidad y seguridad de toda la humanidad.
La humanidad en nosotros se declara absuelta de toda obligación de
fidelidad a principios y valores que sustentan al actual sistema
capitalista, llamando a toda la humanidad a sublevarse y rebelarse
pacíficamente contra ellos.
II .En defensa de la Madre Tierra y contra la mercantilización de la Vida.
Grito de rebeldía
Convocatoria a la movilización de la población andaluza el 12 de Octubre 2009
1. Ante la crisis sistémica y civilizatoria que padecemos el IX
Foro Social Mundial 2009 (FSM) nos ha convocado desde Belén do Pará
(Brasil) a la movilización mundial del 12 de Octubre en Defensa de la
Madre Tierra y contra la mercantilización de la Vida. Y hemos decidido
acudir porque la historia de la humanidad, lejos de haber concluido, se
está construyendo en estos días. Porque nos enfrentamos a importantes
amenazas globales: cambio climático, muerte por hambre masiva,
migraciones multitudinarias, agotamiento del petróleo, crisis financiera
internacional y enfrentamiento entre culturas.
Hoy más que nunca tenemos que manifestar nuestra confianza,
creencia y fe en la humanidad, en su capacidad para regenerarse,
repensarse y reorganizarse. Ha llegado el momento de cambios
substanciales, radicales y profundos. Ha llegado el momento de transitar
hacia otro mundo mejor posible en beneficio de la totalidad de la
humanidad y la biosfera sustentado en una ciudadanía libre con sólidos
valores éticos de co-responsabilidad y solidaridad para avanzar hacia
una verdadera Democracia de la Tierra, en donde se preserven los
derechos de la naturaleza, la humanidad y las personas individuales.
2. Los poderes que han provocado la actual crisis, mantienen sus
atributos y en vez de reconocer sus errores y el daño que han provocado a
la humanidad y a la Vida en la Tierra, están desafiantes buscando la
recuperación y mantenimiento del capitalismo en unas instituciones
globales corruptas y antidemocráticas, al servicio de intereses privados
minoritarios e ilegítimos y carentes de todo control social y político.
3. La humanidad tiene el derecho y el deber de abolir las formas
de organización económica, social y políticas cuando estas provocan
invariablemente una larga serie de abusos y usurpaciones dirigidas a
someter al pueblo a un despotismo absoluto; es un derecho y un deber
derrocar este gobierno de las cosas y proveer de nuevas salvaguardas
para la biodiversidad, las libertades y la futura felicidad y seguridad
de toda la humanidad. En la actualidad el sistema capitalista se ha
mundializado. Hoy ya está claro que hay dos intereses contrapuestos: el
interés del capital por mantener las condiciones de su reproducción
ampliada, aumentar su crecimiento mercantilizando todos los aspectos de
la vida y sustrayéndose de todo tipo de control democrático; y los
intereses de la humanidad por preservar las condiciones de supervivencia
y sostenibilidad de la propia especie humana en nuestro planeta, y
alcanzar los mayores grados de dignidad y desarrollo humano a través de
la participación y profundización democrática.
4. Hoy nos quieren justificar que el sector financiero estrangule a
la economía productiva y que las necesidades sociales y ambientales
queden supeditadas a un crecimiento del PIB que carece de sentido común y
de valores éticos. Los capitalistas, aquellos que poseen o gestionan la
riqueza y el capital, condenan a millones de personas: a muerte por
hambre o falta de agua, a la ignorancia, a la enfermedad y al desamparo,
cuando disponen de recursos suficientes para evitarlo, demostrando su
incapacidad para practicar la fraternidad, su incompatibilidad con la
dignidad de los seres humanos.
5. La alternativa real de salida a la crisis, para el Buen Vivir
de toda la humanidad, debe recuperar e impregnarse de perspectiva ética.
Nuestros objetivos son: reducir la desigualdad y polarización social,
distribuyendo la riqueza; producir bienes duraderos; liberarnos de la
dependencia de los escasos combustibles fósiles desarrollando energías
alternativas renovables y relocalizando la economía, conseguir la
soberanía alimentaría de los pueblos solucionando el hambre y la pobreza
extrema; eliminar la especulación financiera sobre bienes alimentarios,
energéticos y monetarios, aumentando la estabilidad financiera y la
satisfacción de las necesidades de la humanidad; y profundizar la
democracia en todos los ámbitos implicando a la sociedad civil en el
diseño, implantación y evaluación de las políticas públicas.
6. Es necesario humanizar la política, uniendo la razón lógica con
las creencias profundas de las emociones y los afectos. Promover la
educación integral del ser humano con criterio propio como fundamento de
la verdadera democracia. Es necesario desarrollar el espíritu de una
ciudadanía universal con conciencia de pertenencia a una única humanidad
fruto y parte de la Vida en este planeta, nuestra Madre Tierra.
7. Para ello, es imprescindible que el conjunto de la ciudadanía
actuemos en coherencia con nuestra ética personal y social en la vida
cotidiana. Para el gran cambio que pide a gritos la humanidad se
necesita, sobre todo, capital humano y espiritual, como recientemente
nos ha recordado el presidente de la Asamblea General de las Naciones
Unidas, Miguel d´Escoto en la Asamblea del G-192. Necesitamos capital
humano y social que aporte fraternidad, cooperación, solidaridad,
amorización, justicia económica y ecológica, compasión y capacidad de
vivir alegremente con todas las diferencias, en la misma casa común: la
grande y generosa Madre Tierra.
Las organizaciones abajo firmantes llamamos a toda la población
andaluza a pronunciarse por el cambio de valores sociales hegemónicos y
la transición hacia un mundo mejor posible, caracterizado por la
justicia social y ecológica, participando y asistiendo a la
manifestación unitaria de Andalucía el 12 de octubre, en Sevilla a las
12.30 desde el Pabellón de Portugal en el Prado de San Sebastián, en el
Día de Acción Global Mundial convocado por la asamblea de los pueblos en
el último Foro Social Mundial y lanzando un claro GRITO DE REBELDÍA y
nuestra DECLARACIÓN DE INDEPENDENCIA del sistema capitalista, y de
cualquier otro sistema, que dañe a la Madre Tierra, amenace con el fin a
la humanidad cosificándola y a la propia existencia de la Vida.